A veces, lo que parece una simple diversión pasajera puede tener un impacto duradero. En este post hablamos del valor de las risas compartidas en los equipos.

Aunque nos empeñemos, ningún organigrama o proceso puede plasmar lo que un sistema vivo, como una organización, necesita hacer para funcionar. Precisamente, es gracias a todo lo que no está escrito que la organización consigue funcionar y sobrevivir. Este post trata de “liderar a tus superiores”, un concepto de Niklas Luhmann, gran pensador sistémico en una de sus reflexiones muy interesantes para el mundo organizacional. Dicho de paso, no recomiendo leer a Luhmann, es la travesía del desierto. Más vale empezar por este post…

¿Lo tuyo es tomar las riendas de la situación y tirar para adelante? ¿Te hubiese gustado hablar en una reunión, pero no había hueco? Son maneras de ocupar o no un espacio. Y, a pesar de ser intangible, quién ocupa espacio o no es muy palpable para todas las personas presentes, aunque no siempre son conscientes de ello. En este post hablamos de ello y de una metáfora prestada de un premio Nobel de la física.

Los puestos de mayor responsabilidad en las organizaciones y liderar a equipos requieren gestionar situaciones que pueden resultar difíciles. Estas semanas hemos escuchado voces que cuentan situaciones cuando las personas que ocupan estos puestos no ocupan su rol.

Se dice que para crear hábito se necesitan 21 días. ¿Por qué no apoyarnos en la fuerza de los retos colectivos durante 21 días en nuestros equipos también cuando queremos fortalecer o impulsar ciertos valores, cambios o nuevos proyectos?

Unos padres regalan dos camisas a su hijo. Para complacer a sus padres, el hijo se pone de inmediato una de ellas. Entonces, los padres le preguntan: «¿No te gusta la otra camisa?» Cuando se pone la otra camisa, le vuelven a preguntar: «¿No te gusta la otra camisa?» En el entorno empresarial, las personas también se enfrentan a demandas contradictorias o situaciones en las que no pueden cumplir con las expectativas (explícitas e implícitas). Este post habla de este fenómeno, llamado doble vínculo.

¿Cuál es la salsa secreta que refuerza el vínculo entre las personas, genera una mayor conexión y cohesión y un sentido de pertenencia para empezar a trabajar realmente como equipo? Este post trae una receta.

No podemos elegir la música de nuestras vidas, lo único que podemos elegir es el paso de baile, la respuesta consciente que decidimos dar a cada situación. El autoconocimiento, la confianza nos permiten dar pasos flexibles a la vez que más seguros. Y sobre esto reflexionamos en este post.

El feedback o retroalimentación es una de las mayores fuentes de aprendizaje en un equipo y para cualquier persona. Sin embargo, pocos equipos están entrenados y acostumbrados a entregarlo y recibirlo – y menos de manera “radical”. Y de franqueza radical (Radical candor) y lo que busca generar hablamos en este post.

Judith Castillo ¿Alguna vez, por miedo a las consecuencias, has optado por no hablar en una reunión? ¿O has sentido que tus ideas no eran escuchadas o valoradas? No estás solo/a. No atrevernos a decir lo que pensamos o sentimos es algo que la mayoría hemos experimentado alguna vez. Desde que Google en su búsqueda […]